Nos gusta comer, y nos gusta probar cosas nuevas. Nuevas aunque sea para nosotros; porque son preparaciones de las que se tiene referencia desde hace más de 2000 años, así lo dicen los historiadores.
Es por tanto una labor obligatoria, para nosotros, que le dedicamos bastante tiempo a investigar lugares y productos que nos llevan a tiempos pasados. Tiempos en los que no había tanta prisa, teléfonos móviles y redes sociales.
Había oído hablar del garum hacía años y lo había llegado a probar en un local de Cartagena. No saqué demasiadas conclusiones, me pareció hueva de mujol picada con aceite de oliva. No pasó de ahí, quizás no fue la auténtica.
De wikipedia:
El garo (del latín garum, y este del griego γάρον)[1] es una salsa de pescado preparada con vísceras fermentadas de pescado muy extendida en la gastronomía romana. Se empleaba por los habitantes de la Antigua Roma, principalmente, para condimentar o acompañar gran cantidad de comidas, aunque se usaba asimismo en medicina y cosmética.
El caso es que nos ha llegado una remesa -pequeña- de garum pata negra y aceite de garum pata negra también, que pretendemos probar este martes en una de nuestras ciudades favoritas; en la muy noble, muy leal ciudad de Yecla.
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| ¡pura ambrosía! |
¿Y como se nos ha ocurrido hacerlo? Pues en la merienda, en el preámbulo de una Cena de Carricoche...
¿Dónde? En uno de nuestros lugares de Culto, a la hora del Carricoche: 7:30pm y tendrá la entidad de aperitivo para una cena posterior. Sidra maridaría bien creo...
¿Cena? Sí, por ejemplo un cus cus de ternera o cordero realizada por una cocinera 5 estrellas con estudios de hostelería en Francia que tiene una mano extraordinaria; qué digo extraordinaria; ¡¡mejor aún !!
Al cus cus también le tenemos ganas; vamos detrás de él desde bastante tiempo...
Habrá birra como para una boda again 🍺🍺🍺🍺🍺
Ora pro nobis...
🚀🚀🚀
Añado y pienso en voz alta: Cómo debe de estar ese garum con pan del Zenón tostadito... 😀
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